Exhibiendo recibos como evidencia, Argüello mostró la compra de diversos productos, destacando el caso de la carne picada, adquirida a 7600 el kilo, mientras que en el supermercado el mismo producto estaba valuado en 2 mil pesos por kilo, lo que representa un incremento del 280 por ciento.

Esta situación se repitió con otros productos como la pulpa, que fue comprada a un precio un 29 por ciento superior al del mercado, así como también el puré de tomate, los fideos y las batatas, que presentaron sobreprecios del 23, 32 y 40 respectivamente.

Además, Argüello denunció que el municipio pagó un aceite a 2 mil pesos cuando su valor real en el establecimiento era de 1300, la harina a 900 cuando su precio original era de 615, y el vinagre con un sobreprecio del 52 por ciento. Similar situación se encontró en la compra de verduras como cebolla, papa, tomate y zapallito.

En resumen, el dirigente sostiene que la suma total de los sobreprecios alcanza el 100 por ciento, representando un gasto excesivo de 2,6 millones de pesos cuando el monto adecuado debería haber sido de 1,3 millones.

Concluyendo su publicación, Argüello se paró frente a la municipalidad, la cual denominó como un "monumento a la corrupción", y apuntó directamente contra el jefe comunal, sugiriendo que esta situación podría ser solo la punta del iceberg de la corrupción en otras áreas de la gestión municipal.